Contradicciones

Me siento bien, bueno, tal vez no del todo, o sí. Estoy cómoda, pero... No, creo que no. Y me gusta estar acá, sí, eso es seguro. ¿Hay algo seguro? ¡Quiero ir, sí! Pero no, tal vez sea mejor quedarme en casa... No sé si al final hice bien en venir, no sé cómo me siento. No, la verdad no me importa... ¿Qué dije? ¿Que no importaba? ¡Pero! Bueno, tal vez importa un poco, solo por hoy. No sé si quiero verte, no sé si quiero verlos, no sé si quiero estar ahí, pero si no voy, tarde o temprano voy a lamentarlo. Se me escapa todo, igual no me interesa (SI). No quiero hablar con vos (mentira). ¿Dulce o salado? No sé.  Voy a sonreír ¿Pero por qué? Mejor no (igual lo hago). Chau, chau yo no puedo estar con ustedes, ¿No entienden que no quiero hablarles? ¡Yo quiero estar sola! Pero sentada sola en el rincón, me doy cuenta de que tal vez eso no es lo que necesite. Te quiero (mucho) o tal vez no tanto, no sé. ¿Pelo corto o largo? No sé. Estoy muy preocupada pero no me importa. ¿Tengo frío? Tal vez es sueño con una pizca de hambre... ¡Esperen! Yo no tenía hambre, ¡Estoy segura! Aunque me duele la panza, tal vez haya comido demasiado, o tal vez tenga el estómago vacío, no sé. Mi cuerpo no distingue las sensaciones (o tal vez las percibe demasiado). Me molestás, me molestás sobremanera (me encantás). No quiero contarte, no quiero, aunque tal vez muera por gritártelo todo. Voy y vengo, vuelvo y me quedo pero después de un rato me quiero ir otra vez. Estaba segura del camino que debía tomar, pero creo que lo perdí, tal vez lo perdí y tampoco me di cuenta de eso.